La semilla de soya es uno de los alimentos naturales con mayor contenido en proteínas, vitaminas, minerales y valiosos elementos fotoquímicos. De ella se deriva un nutriente bajo en grasa saturada, y libre de colesterol y lactosa.

A nivel estructural, la proteína de soya forma parte de células, tejidos y órganos; a nivel inmunológico, configura anticuerpos, y a nivel regulador, interviene en los procesos bioquímicos de nuestro cuerpo.

Incluirla en nuestra alimentación reduce el riesgo de enfermedades cardíacas: una dieta con proteína de soja no solo incide en el colesterol total y el colesterol malo (LDL), sino también en los triglicéridos.

Es, además, libre de lactosa. Para las personas intolerantes a la ‘azúcar de la leche’, que se recuperan de enfermedades gastrointestinales o que son lacto-vegetarianas, es muy beneficiosa. Por lo general, los productos con proteína de soja son adicionados con calcio y vitaminas como fósforo y vitamina D que son buenos para la salud ósea.

También reduce el riesgo de cáncer de seno y próstata, permite controlar la glicemia y equilibra las hormonas femeninas. La proteína de soja posee isoflavonas, que favorecen al equilibrio hormonal de la mujer, regulando su ciclo menstrual, y aliviando síntomas indeseables de la menopausia como los calores, los problemas urinarios, las interrupciones de sueño, entre otros.

La Soya es, además, ideal para la alimentación infantil, pues aporta proteínas de alta calidad para satisfacer sus necesidades nutritivas y de desarrollo. Sus derivados son una gran opción para tus comidas diarias.

La soja es sencillamente una legumbre, y como suele ser propio de las legumbres, también aporta una gran cantidad de nutrientes, entre los cuales destacan principalmente las vitaminas del grupo B, la vitamina E, y minerales como el calcio, el potasio, el zinc, el hierro y el fósforo.

La soya está considerada uno de los mejores alimentos que existen, se trata de uno de los alimentos más estudiados por científicos, médicos y nutricionistas desde hace décadas, y a medida que avanzan las investigaciones la proteína de soya no solamente es beneficiosa para tu cuerpo, sino que también te ayuda a optar por una vida mucho más sana y comprometida con hábitos de vida saludables. Esto, a la larga, se traduce en una mayor calidad de vida para ti.