De acuerdo a datos del año 2021 del Banco Mundial la actividad agrícola representa un 12,9% del Producto Interno Bruto de Bolivia. Estudios del Instituto Nacional de Estadísticas (INE) reflejan que la agricultura (tradicional en el altiplano y valles, y moderna en el oriente, norte y sur) ocupa una superficie de 4.018 (miles de hectáreas) aproximadamente en 2021, siendo una actividad de gran importancia para la población boliviana. Se producen cereales, tubérculos, hortalizas, verduras, productos estimulantes, cultivos industriales y frutas.

Naturalmente, las plantas se nutren sintetizando su propio alimento del suelo, aire y agua. Sin embargo, al reutilizar los suelos (proceso que normalmente ocurre en suelos para cultivos) estos van perdiendo sus características naturales y su calidad disminuye, reduciendo la efectividad de la producción. Es por esto que, en la necesidad de mejora, se opta por la aplicación de fertilizantes que aporten a la calidad del suelo y efectivicen la producción de los cultivos.

Una solución es la aplicación de fertilizantes NPK, el nitrógeno (N) es el motor del crecimiento y regeneración de la planta pasando a formar aminoácidos y proteínas al ser absorbido, el fósforo (P) aporta en la transferencia de energía (de gran importancia para la fotosíntesis) y el potasio (K) mejora la resistencia a factores climatológicos como sequías y heladas. Por tanto, el uso de insumos estables y de calidad es clave para obtener los resultados esperados en los cultivos.

Así mismo, es importante verificar la composición del fertilizante y que sea el adecuado al requerimiento de cada cultivo específico. El valor del fertilizante NPK se refleja medido en la cantidad que posee de cada componente, por ejemplo, un fertilizante NPK 15 – 5 – 20 quiere decir que este fertilizante posee 15% de nitrógeno, 5% de fósforo y 20% de potasio.

Un insumo importante para la elaboración de este fertilizante es el nitrato de potasio para incrementar los rendimientos y mejorar la calidad. La afinidad entre la carga negativa del nitrato y la carga positiva del potasio disminuye las posibilidades de adsorción en las partículas del suelo, haciéndolo disponible para las plantas por un mayor período de tiempo.

En la actualidad, en un mercado exigente y dinámico, los cultivos necesitan monitoreo optimización para tener un mejor aprovechamiento. Existen diversos métodos, especialmente tecnológicos, que colaboran en esta necesidad y brindan eficiencia en los procesos productivos. El uso de fertilizantes no es una excepción y su aplicación acompaña al mercado creciente.